Oscura Serpiente del Paraiso
sinuosa entre ceniza de los barcos
que un día hicieron el viaje por tí,
esperando el próximo que te lleve
mar adentro para siempre volver
a la rivera, cementerio
de navios rotos por el desatre
que siempre llega ineludiblemente.
Pudrición de las maderas
bañadas de alquitrán
que acaba siempre por hacernos volver
a la costa de algas
que se mueren ahogadas
en los desechos de nosotros.
Nosotros, que siempre acabamos siendo basura
arrojada sobre la arena,
batida con maderas viejas y alquitrán
sobre la playa triste
de un invierno que nos apreta el corazón
hasta casi intoxicarnos.
Nosotros que solo respiramos humo tóxico
para vivir.
No comments:
Post a Comment